También se prevén agravantes de hasta cinco años y elevadas penas económicas en caso de causar daños graves y permanentes, llevar a cabo mutilaciones o abusos sexuales con acceso carnal, y de hasta 6 años para quienes causen la muerte de un animal a través de actos de este tipo.
En el apartado que define los malos tratos, la iniciativa incorpora nuevas figuras como el encierro en lugares de calor o frío extremo, el abandono y desamparo, el uso para espectáculos circenses y la falta de asistencia médica cuando fuera necesaria.
El tema fue tratado en tres plenarios informativos de los que participaron especialistas, veterinarios y asociaciones protectoras. Para llegar al dictamen, se tuvieron en cuenta cerca de 20 proyectos que abordan la problemática.
“Estamos en un momento histórico, tenemos que estar orgullosos”, remarcó el titular de Legislación General, Daniel Lipovetzky. Y agregó: “La ley actual fue una ley pionera, pero quedó antigua, tiene más de 50 años”.
Por su parte, la titular de Legislación Penal, Gabriela Burgos, destacó: “Ahora podemos llevarlo al recinto para tener una ley este año que modifique y amplíe la conceptualización de lo que es maltrato y crueldad contra los animales y amplíe la concientización”.
La situación de los caballos que llevan carros en la vía pública quedó fuera da discusión porque, según Lipovetzky, se priorizó “el consenso”. Sin embargo, el diputado aclaró que “hay un compromiso para elaborar un dictamen específico que promueva un mecanismo de sustitución en la tracción a sangre”.