El pasado sábado 7 de septiembre, el ministro de Defensa de la Nación, Luis Petri, visitó la provincia de San Juan en el marco de la ceremonia de cambio de guardias históricas de regimientos, realizada en la explanada del Teatro del Bicentenario. Sin embargo, más allá del acto oficial, las miradas locales se dirigieron a las declaraciones del ministro sobre la delicada situación que atraviesa la Fábrica de Explosivos de Jáchal, cuya continuidad y la de sus trabajadores se encuentra en vilo.

La fábrica, que en los últimos años jugó un papel importante en la producción de explosivos para sectores industriales como la minería, se enfrenta a un complejo panorama tras la pérdida de su principal y único comprador: la mina Gualcamayo. Esta situación dejó a la planta en una situación crítica, ya que la falta de demanda generó incertidumbre sobre su operatividad y sobre el futuro de los puestos de trabajo que dependen de ella.

En rueda de prensa, el ministro Petri fue consultado sobre este delicado tema. El titular de Defensa reconoció el difícil contexto que atraviesan muchas de las empresas del Estado, incluidas las de producción militar. “Nosotros estamos evaluando todas las empresas del Estado. Las recibimos en una situación desastrosa, calamitosa, con un déficit y desequilibrio financiero que hoy estamos reestructurando. Estamos evaluando propuestas para hacer inversiones público-privadas y ponerlas de pie para que puedan producir para la Defensa”, expresó Petri.

Aunque la Fábrica de Explosivos de Jáchal quedó fuera de la primera versión de la Ley de Bases para privatizaciones, el futuro de la planta sigue siendo incierto. La planta no figura entre las privatizaciones inmediatas, pero su difícil situación financiera pone en riesgo su continuidad a largo plazo. Ante este panorama, el ministro dejó abierta la posibilidad de inversiones mixtas, una alternativa que permitiría revitalizar las instalaciones y asegurar su operatividad, aunque no se precisaron mayores detalles sobre plazos o proyectos concretos.

A este escenario incierto, se suma que muchos trabajadores de la Fábrica de Explosivos, ante el temor de un posible cierre, se acogieron recientemente al programa de “Egreso Voluntario” impulsado por el Gobierno nacional de Javier Milei. Esta iniciativa busca reducir la planta de personal en empresas del Estado mediante compensaciones económicas, lo que generó más preocupación en la comunidad por la posible disminución de la fuerza laboral activa en Jáchal.