Por precaución, debieron evacuar a alumnos, docentes y personal de la Escuela Agroindustrial Mons. Dr. Juan Antonio Videla Cuello, ubicada en la localidad de San Isidro. La medida se tomó tras una llamada anónima que advertía sobre la presunta colocación de un dispositivo explosivo en un establecimiento de características agrotécnicas dentro de la provincia.

Según confirmaron fuentes policiales, la comunicación telefónica fue realizada por un hombre que no brindó mayores precisiones sobre el lugar exacto donde se habría colocado el supuesto artefacto. Esa falta de datos obligó a las fuerzas de seguridad a activar el protocolo de amenazas de bomba en diferentes escuelas agrotécnicas de San Juan, entre ellas la conocida Escuela de Enología en el Gran San Juan, pero también instituciones similares distribuidas en distintos departamentos.

En el caso de Jáchal, la evacuación se desarrolló de manera ordenada, mientras los estudiantes eran retirados del edificio y se ponía en marcha un exhaustivo control de las instalaciones. Del operativo participaron efectivos de la Subcomisaría de Villa Mercedes a cargo del subcomisario David Salomón, el Destacamento N°2 de Bomberos de la Policía de San Juan y la Unidad Fiscal de Investigación del Norte (UFI Norte), además de otros equipos especializados.

Las autoridades destacaron que, si bien no se encontró ningún artefacto explosivo hasta el momento, cada amenaza debe ser tomada con absoluta seriedad. En ese sentido, recordaron que este tipo de episodios no solo generan temor en la comunidad educativa, sino que además movilizan un importante despliegue de recursos humanos y materiales.

Según supo Actualidad Jachallera, las escuelas agrotécnicas evacuadas preventivamente fueron Ejercito Argentino de Villa San Agustín en Valle Fértil, Manuel Belgrano y Videla Cuello de Jáchal, también la escuela Cornelio Saavedra de Rodeo en Iglesia, entre otras.

Por estas horas, la policía y la justicia investigan la procedencia del llamado, con el objetivo de identificar al responsable de la amenaza y determinar si se trató de una falsa alarma. Mientras tanto, las autoridades provinciales pidieron calma a las familias y garantizaron que continuarán aplicando los protocolos de seguridad cada vez que una situación de este tipo lo requiera.