
preocupación de productores
Cortes de agua, error en el canon de riego y precios bajos de la cebolla agravan la situación de los productores de Jáchal
En medio de una crisis productiva y económica sin precedentes, el Departamento de Hidráulica de San Juan comenzó a cortar el suministro de agua de riego a productores morosos, medida que podría impactar en Jáchal en los próximos días, donde el 80% del padrón arrastra deudas. A la caída del precio de la cebolla —principal cultivo local— y la emergencia hídrica que obliga a largos cortes programados, se suma un error oficial en el canon de riego que aún no fue corregido por la Legislatura provincial.
Redacción Actualidad Jachallera
En los últimos días, el Departamento de Hidráulica de San Juan comenzó a ejecutar cortes de servicio a usuarios que no regularizan sus deudas por el uso de agua para riego, una medida que puede golpear con fuerza a los productores de Jáchal en un contexto de extrema fragilidad económica.
Omar Aciar, presidente de la Junta de Riego de Jáchal, confirmó que los productores locales ya comenzaron a recibir intimaciones para el pago correspondiente. Según la información oficial que recibieron, el 80% del padrón de productores regantes del departamento está en situación de morosidad, acumulando deudas que, en la mayoría de los casos, se arrastran desde hace tiempo. “La mayoría son productores de cebolla, un producto que va perdido valor con los años. Hoy una bolsa de 18 kilos se vende a $1.000. Hay un año que vale y después cinco que no vale nada”, lamentó.
La prensa provincial indicó que las primeras suspensiones se concretaron en el departamento Sarmiento, particularmente en el Canal Magdalena, y ahora la medida comenzará a aplicarse en otras zonas de la provincia, incluyendo Jáchal. La situación se agrava por el poco caudal de agua, que obliga cada año a implementar largos cortes programados para almacenar el recurso y poder garantizar riego en los momentos críticos. Este año, el esquema prevé 105 días de corte programado, distribuidos mensualmente, con picos de hasta 18 días sin servicio, principalmente en invierno.
El malestar en el sector también se alimenta de un conflicto reciente: en julio, el Consejo de Hidráulica reconoció un “error grosero” en el canon de riego cobrado a los productores jachalleros. El monto real por hectárea debía ser de $24.600, pero se facturó $33.000. Aunque se otorgó una prórroga de 30 días para el pago —que venció el 10 de agosto—, la Cámara de Diputados de San Juan aún no corrigió el error en los montos.
En este escenario, los productores afrontan uno de los años más difíciles que recuerdan: el derrumbe del precio de la cebolla, la emergencia hídrica, la falta de agua para riego y el escaso respaldo de los gobiernos de turno derivan en una mezcla de endeudamiento, tristeza e incertidumbre. Muchos no saben si podrán reunir el dinero para subsistir y, menos aún, para afrontar la compra de fertilizantes y otros insumos imprescindibles para volver a producir.
Una vez más, el campo jachallero queda a merced de una ecuación imposible: producir sin agua, sin precios justos y sin el acompañamiento que asegure su continuidad.
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