malestar e indignación
Una jubilada de Jáchal fue víctima de una estafa virtual, le vaciaron las cuentas y le sacaron un préstamo millonario
Una vecina del departamento fue víctima de una estafa virtual luego de recibir un mensaje de WhatsApp que simulaba ser de una empresa de energía eléctrica, ofreciéndole una bonificación en su factura. Al ingresar a un enlace y compartir datos personales, los ciberdelincuentes tomaron el control remoto de su teléfono, vaciaron sus cuentas bancarias y ejecutaron un préstamo por aproximadamente 11 millones de pesos.
Redacción Actualidad Jachallera
Una nueva estafa virtual sacudió a la comunidad de Jáchal el pasado domingo 11 de mayo, cuando una vecina jubilada fue víctima de un sofisticado engaño a través de la aplicación de mensajería WhatsApp. Según relató la propia damnificada en una entrevista telefónica brindada a Radio Nacional Jáchal, todo comenzó con un mensaje que simulaba provenir de una reconocida empresa de energía eléctrica de San Juan, el cual ofrecía una supuesta bonificación en el servicio.
Con la confianza que suelen generar estos contactos aparentemente oficiales, la mujer accedió al enlace enviado por los estafadores, lo que desencadenó una serie de acciones que permitieron el control remoto de su teléfono celular. “Después de que me pidieron algunos datos, ya no pude controlar nada. Me bloquearon el celular y comenzaron a operar desde allí”, explicó con angustia durante la comunicación radial.
Los delincuentes no solo lograron vaciar sus cuentas bancarias mediante transferencias inmediatas, sino que también gestionaron un préstamo bancario por una suma de 11 millones de pesos. El perjuicio económico fue total, y la vecina, ampliamente reconocida y querida en la comunidad jachallera, decidió hacer pública su experiencia con el objetivo de advertir a otras personas y evitar nuevas víctimas.
La denuncia fue radicada en la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) del Norte, desde donde se lleva adelante una investigación para intentar identificar a los autores del hecho y, además, gestionar la posible anulación del préstamo solicitado fraudulentamente. Fuentes cercanas al caso indicaron que se están recopilando los datos técnicos del dispositivo afectado, así como los movimientos bancarios realizados, para rastrear los destinos del dinero y posibles puntos de conexión de los atacantes.
La modalidad de este tipo de estafas sigue creciendo exponencialmente en todo el país, especialmente en los últimos años, donde los delincuentes aprovechan la vulnerabilidad de personas mayores o con escaso manejo tecnológico para ejecutar operaciones bancarias no autorizadas.
Desde distintos organismos y entidades bancarias se insiste en no acceder a links o enlaces sospechosos ni brindar información personal por mensajería o llamadas telefónicas, y se recomienda verificar siempre el origen de cualquier contacto que solicite datos financieros.
La valentía de esta vecina al contar su caso en los medios locales generó un fuerte impacto en la sociedad jachallera, donde muchos ciudadanos manifestaron su solidaridad y también su preocupación por la creciente ola de estafas virtuales.