En un esfuerzo por combatir la crisis económica y promover una alimentación saludable entre los vecinos, la Unión Vecinal de La Represa, en colaboración con los integrantes de La Buenaventura, puso en marcha recientemente una huerta comunitaria. Esta iniciativa, que busca brindar a la comunidad acceso a verduras y hortalizas frescas, cuenta con la siembra de diversos cultivos, incluyendo cebolla, rabanitos, rúcula, acelga, remolacha, perejil, ajo y plantines de acelga, repollo morado y brócoli, entre otros.

Enzo Bravo, miembro activo de La Buenaventura, expresó su satisfacción con la puesta en marcha de este proyecto. "Estas actividades las realizamos con el objetivo de ayudar a los vecinos del departamento. Estamos dispuestos a colaborar con diferentes organizaciones barriales de Jáchal y apoyamos un merendero en la zona todos los sábados," comentó Bravo.

Además, hizo un llamado a la solidaridad, invitando a la comunidad a realizar donaciones y colaboraciones para el merendero, que desempeña un papel crucial en la asistencia alimentaria de los más necesitados. Bravo destacó la organización y el espíritu de cooperación de los vecinos de La Represa.

"La comunidad aquí está unida y bien organizada, lo que facilita nuestra labor de apoyo y acompañamiento en colaboración con la Unión Vecinal La Represa," añadió. Subrayó que la cosecha de la huerta comunitaria será destinada a los vecinos más necesitados, contribuyendo significativamente a su alimentación y bienestar.

La visión de este proyecto no se limita a La Represa. Enzo Bravo adelantó que planean expandir las huertas comunitarias a otras áreas del departamento de Jáchal que lo requieran. "En diciembre pasado, entregamos plantines de tomates en Villa Mercedes, el centro de Jáchal y el departamento de Iglesia. Nuestra meta es extender esta iniciativa a más lugares, brindando a más personas la oportunidad de beneficiarse de una alimentación saludable y sostenible," concluyó.

Esta huerta comunitaria no solo representa una solución inmediata a las dificultades económicas actuales, sino que también simboliza un modelo de autosuficiencia y colaboración comunitaria. Esta iniciativa fue recibida con entusiasmo por los vecinos, quienes ven en este proyecto una luz de esperanza y un paso hacia una mejor calidad de vida.